domingo, 18 de agosto de 2013

Donde los huesos de mis abuelos y mis padres abonan la tierra del cementerio de Restrepo. Alberto Cardona Gómez, bisnieto de Ricardo y Carmen Ossa Ossa

En dónde están los restos de nuestros ancestros? Pregunta habitual en las familias.
Trayendo a la memoria a Alberto Cardona Gómez, en su autobiografía escrita en la contraportada de su libro de cuentos “El recurso de los inútiles” de 1999, este familiar que nos dejó conocer más de su corta carrera como escritor. Citando aquella frase escrita en la contraportada de su libro titulo esta crónica: “Donde los huesos de mis abuelos y mis padres abonan la tierra del cementerio de Restrepo”. Alberto nació en 1947 y murió en Cali, Valle del Cauca, en 2003. Su hermana, María Cardona Gómez, nieta de Inés Ossa y Horácio Gómez, trasladó su restos de Cali a la iglesia de Restrepo. El cementerio de Restrepo por los años 70 fue trasladado a un predio adyacente por extraña decisión de la parroquia de Restrepo. Este imprevisto cambio ocasionó que muchas familias que habían emigrado y no reclamaron los restos de sus allegados por no tener la información de dicho traslado, se vieron en la pena de no saber a donde fueron a parar sus ancestros. A una fosa común, dicen unos. Por eso hoy en día, como decía Alberto, hoy abonan la tierra del cementerio de igual forma varios descendientes de los Ossa, como lo hacen los tres primeros hijos de Camelia Ossa Ossa de Soto, o los hijos de Inés Ossa Ossa de Gómez, o el hijo de Ricardo Ossa Cardona, o el pequeño de los Ossa Lenis. Familiares que durante los años 20, 30 y 40s vivieron en Restrepo.

Los restos de María del Carmen Ossa Tobón y Ricardo Ossa Montoya reposan en el Templo Votivo del Sagrado Corazón de Jesús, en el barrio Centenario de Cali. Templo de la orden de los Jesuitas. Su arquitectura la compone una sola nave central, decorada el altar con un bello mosaico policromado y grandes frescos en el techo y en los laterales, destacan la vida pública de Jesús. Acompaña este con unos magníficos vitrales españoles. Los osarios están ubicados justo detrás de la sacristía e iluminados con luz exterior, no tienen ese aspecto tan sobrecogedor que dan las catacumbas. Ricardo Ossa (Osario 129), María del Carmen Ossa (Osario 229). El que se encontrasen allí no es casualidad, fue porque muy cerca del Templo vivía Pedro Ossa Ossa. Él con sus hermanos Tulio y Oswaldo, que en aquellos años vivían en Cali, trajeron los restos de Buga y de Pereira.
Para los familiares en el extranjero cuando estén de visita por Cali, también para los que viven en Colombia, les recomendamos incursionar por el templo Votivo del Sagrado Corazón de Jesús. Es de fácil acceso, un bello espacio para la sana reflexión y meditación. Llegar es fácil, queda en el barrio del centenario, a una cuadra del centro comercial Centenario.
 
Cementerio de Restrepo
En búsqueda de testimonios, palabras, vida y muerte, estuvimos varios Ossas en Restrepo buscando respuestas de lo acontecido. Quién mejor que los mayores para buscar la verdad de estos rumores, testimonios o leyendas populares? Al tratarse de un sitio que suele ofrecer muy pocas aclaraciones y que viene a ofrecer múltiples versiones, dependiendo además de la condiciones sociales, a esto lo envuelve el mito de los muertos. Nos cuenta el señor Noel Navarréte: “El nuevo esta al lado del antiguo. Como
antiguamente se enterraba directamente en tierra, aquello se llenó ya no había espacio en donde enterrar a mas personas. Se trató, por acción comunal, de hacer unos bloques (bóvedas o nichos) a un costado del cementerio pero eso se llenó también a consecuencia de que en aquellos años hubo mucha violencia y mataron a mucha gente. Fue cuando el cura junto con la Alcaldía resolvieron construir uno nuevo pero de bóvedas – nichos y cada cuatro años los dolientes tienen que retirar el cuerpo, pasarlo a un osario o llevárselo a otros lugares. Pasado un tiempo si los dolientes no lo reclaman van a la fosa común”
Pregunta: Pero porqué no conservaron el antiguo con las tumbas y sus ornamentos levantados por los dolientes que no se limitan a poner la lapida? En algunos casos llegan a construir todo un mausoleo, lo que da sentido de un pasado e identidad, ensalzan al difunto restrepeño. Muchos pueblos conservan sus antiguos cementerios es historias de su pasado. Es una cultura que tuvo que haberse respetado.
Lo que pasó aquí, nos comenta Noel Navarréte, fue que el cura se le ocurrió reutilizar el terreno para hacer una urbanización, un plan de vivienda de Interés Social, claro esto también es fruto de la violencia que vive Colombia los desplazados. Según el comisionado de las Naciones Unidas (ACNUR) unos cuatro millones de personas deambulan por las regiones, viven peor que los pobres y quién mas que un cura de pueblo que sabe de los problemas de la falta de vivienda que existe. Deben de ser miles las personas que se acercan a las sacristías a pedir ayuda, pusieron en marcha el proyecto pero se encontraron con el rechazo social de los mitos que envuelve la muerte, las leyendas urbanas de fantasmas (como si Michael Jackson en su danza en ghost les fuera a bailar por las noches "Ghosts""Is It Scary" and "2Bad"), y la película poltergeist por los años 80 enriqueció mas estas leyendas urbanas. Los dolientes que pudieron retirar sus familiares lograron conservarlos en osarios, pero los que no atendieron al llamado, fueron a fosas comunes y otros quedaron enterados, según comentan los del pueblo mas de la mitad del cementerio se quedaron. Se trajo una excavadora, retiraron las lápidas y ornamentos luego se allanó el terreno se paso una aplastadora de rodillo y se le sembró pasto, prado.

En nuestra incursión por el terreno actual, encontramos solo una lápida en relieve con una cruz en todo el terreno, como vestigio de testimonio de una cultura que tuvo que ser preservada, la identidad de un pasado desde los inicios del pueblo: La Culebrera en 1913, Conto 1924 y luego llamado Restrepo hasta nuestros días. El levita por querer ayudar, destruyó el pasado del pueblo de Restrepo. 
Ya por 1998 llegó otro sacerdote a la parroquia de Restrepo, nos comenta Carlos Eduardo Ossa Lenis, nieto de Ricardo Ossa Ossa hijo, quien trabajó en la alcaldía de Restrepo como arquitecto del municipio. El cura que llegó tuvo como proyecto hacer allí un jardín cementerio para el municipio, tipo Jardines cementerio del recuerdo en Bogotá o la aurora en Cali. Ya el nuevo existía, era en los terrenos donde estuvo el antiguo, lo que hizo fue acondicionar el terreno con maquinaria, pasó avisos por todo el pueblo y en el púlpito de las misas, informando que el que aún tuvieran familiares ahí los recogieran, dando una espera de varios meses. Fueron retirando cruces y lápidas, sus pequeños mausoleos o sepulcros que dolientes fueron construyendo, y así fueron adecuando el terreno para el Jardín cementerio. La idea era vender lotes a familias a perpetuidad, que es el proceso de este tipo de cementerio, para que los Restrepeños pudieran enterrar un familiar y al cabo de cuatro años desenterrarlo para enterrar otro y así sucesivamente. El Padre Jorge Sánchez Ramírez lo iba a bautizar con el nombre “El Parque Cementerio Jubileo 2000”. Se había hecho maqueta del proyecto y ya habían vendido algunos lotes. Todo el proyecto se paralizó a la trágica muerte del padre, el sacristán, el sepulturero y el conductor de la parroquia, masacrados al estilo de los gánster de Chicago de los 30, cuando se desplazaban en un campero Chevrolet del aeropuerto al pueblo. El padre también había organizado la construcción de una urbanización en un lote de la parroquia, pero esta vez a la entrada del pueblo, un plan de vivienda. El cura que llegó no quiso continuar con las obras y todo quedó en la memoria, abandono hasta nuestros días.

Restrepeños visitan la tumba familiar en el antiguo cementerio. Foto archivo de la gobernación del Valle.
 
Narra Ricardo Ossa Lenis, nieto de Ricardo Ossa Ossa hijo: “Cuando existía el cementerio, muchos restrepeños se reunían los fines de semana a tomarse unos tragos en los bares del pueblo, un curioso personaje del pueblo en aquellos años llamado “Pilatos” (ese personaje típico que estaba en todas las fiestas del pueblo y que todo Restrepo termina conociendo) organizaba para la madrugada paseos de borrachera al cementerio. Se contrataban músicos para dar serenatas a los amigos difuntos y sentados en sus tumbas les amanecía entre musica, recopilando anécdotas, relatos, risas y cuentos”. Una forma muy peculiar de contar la historia del pueblo.

Un Ángel en Pereira
Olga Peláez Ossa, modela para Ángel en Pereira durante su niñez.
 
Modelo de Ángel para una tumba.
Narra Melva Peláez Ossa vda de Vernaza: “Cuando vivíamos en Pereira se murió la mamá de una compañera del colegio de la “mónita Peláez”, como le decían sus compañeras por aquellos años, como Olga era rubia, con unos crespos muy lindos y ojos claros, la escogieron como modelo y la vistieron de ángel para la escultura a escala que pondrían en el mausoleo de la mamá de su compañera del colegio. “La Foto Modelo de Ángel”, fue tomada cuando vivíamos en la ciudad de Pereira”.

Angelitos”
Hay fotos en los álbumes de la familia que muchas veces pasan desapercibidas o las muestran muy rápido, son aquellas que nos recuerdan el dolor y la pena de la pérdida de un ser querido. Recién nacidos o niños de corta edad en su nuevo hábitat, el cementerio, son las llamados Angelitos por nuestras abuelas y madres, que muchas veces se fotografían al lado de su tumba, como queriendo dejar un testimonio de que siempre acompañaran a su Angelitos Muertos.
El niño muerto fue objeto de culto en las diferentes culturas desde la antigüedad. El culto varía dependiendo de la época y la cultura de que se trate. Se les enterraba con juguetes u objetos de uso cotidiano. En la Europa medieval, además de monumentos funerarios se colocaban epitafios con notas biográficas y frases que expresaban la pesadumbre y el deseo de perpetuar la memoria del niño muerto. Invitándolo a tomar su lugar en el coro de ángeles. Por eso a las fotografías post mortem de niños, a partir del siglo XIX, se les llamó de "angelitos". En la religión católica de América los niños que morían sin pecado original por haber sido bautizados y sin ningún otro pecado en vida, iban directamente al cielo para convertirse en Angelitos, en cambio, los que no habían sido bautizados eran enterrados con los ojos abiertos para que pudiesen ver la gloria del señor, y se dice que iban al Limbo.

Fotografía post mortem

La fotografía de difuntos fue una práctica que nació poco después que la fotografía (un 19 de agosto de 1839) en París, Francia, que luego se extiende rápidamente hacia otros países. La práctica consistía en vestir el cadáver de un difunto con sus ropas personales y participar lo de un último retrato grupal, con sus compañeros, familiares, amigos, o retratarlo individualmente. La fotografía mortuoria no era considerada morbosa, debido a la ideología social de la época del Romanticismo. En dicho período se tenía una visión nostálgica de los temas medievales y se concebía la muerte con un aire mucho más sentimental, llegando algunos a verla como un privilegio.

El hecho de fotografiar muertos tiene antecedentes pre-fotográficos en el Renacimiento, donde la técnica era el retrato por medio de la pintura en el llamado memento mori, frase que deriva del latín, "recuerda que eres mortal" y era utilizado, en lo que a historia de arte se refiere, para la representación de los difuntos; otra técnica de la época medieval donde se concebía que el fin era inevitable y había que estar preparados. La composición de retratos de muertos, especialmente de religiosos y niños se generalizó en Europa desde el siglo XVI. Los retratos de religiosos muertos respondían a la idea de que era una vanidad retratarse en vida, por eso una vez muertos, se obtenía su imagen. En estos retratos se destacaba la belleza del difunto y se conservaba para la posteridad. Los retratos de los niños en cambio eran una forma de preservar la imagen de seres que se consideraban puros, llenos de belleza y eran la prueba misma de que la familia del desafortunado niño, había sido elegida para tener un "angelito" en el cielo.

La ceniza fue entre muchos pueblos una señal de dolor y de arrepentimiento.
En la primitiva Iglesia el obispo ponía un poco de ceniza en la frente del pecador al principio de su penitencia y de aquí viene la práctica, mandada en el Concilio de Benevento celebrado en el año 1091, de ir a recibir la ceniza el primer día de cuaresma. Hay algunas órdenes monásticas, como los trapenses, que ponen a los religiosos en medio de la iglesia sobre una cruz de ceniza poco antes de morir, para recordarles su origen y a lo que van a parar. Los deseosos de acelerar el proceso a ceniza les recomendamos la incineración en vuestro deseo de fin de vida que hacer con su cuerpo y como quieren que sean despedidos, les proponemos la incineración, a Ivan Soto Ossa enterrado en el nuevo cementerio de Restrepo preguntamos por su ubicación al sepulturero quien no se le izo familiar el nombre pero nos informo que si lo enterraron en bóveda y pasado cuatro años no lo reclamaron los dolientes pasaría a la fosa común tristemente este fue el final de Ivan Soto Ossa.
La fuentes: Relatos, testimonios de familiares y amigo Noel Navarréte, en Restrepo, una corta información en Wikipedia sobre fotografíapost mortem.
 
Tumba anónima en solitario
Restos de un pasado lleno de historia, tumba en “solitario”, como queriendo dejar testimonio de lo que fue el lugar. Muchos pueblos conservan sus antiguos cementerios, historias de su pasado. “Era el lugar de reflexión, sitio de cultura e historia que tuvo que haberse preservado y respetado en Restrepo”. De fondo una procesión en dirección al nuevo cementerio, suben lentamente, en silencio sepulcral, recorrido que han hecho todos los habitantes de Restrepo, anteriormente estas escenas captadas en blanco y negro hoy a colores. El dolor de los dolientes es el mismo y seguirá siendo el mismo cada vez que pasen por lo que fue este cementerio de tumbas y mausoleos, hoy un potrero al lado del nuevo cementerio de bóvedas – nichos. 
Interactuando con Noel Navarréte 79 años,
Ex-alcalde de Restrepo por los años1982 -1984, persona de gran conocimiento sobre la historia de Restrepo y lleno de anécdotas sobre la vida social de los pobladores. Me muestra el libro escrito por Dario Betancur (historia de Restrepo), su esposa se ríe y dice: “Volvió a sacar ese libro del cual él es muy critico al leerlo, si lo tiene todo subrayado... y según él es donde hay errores” Si, claro, hay muchos errores en los documentos administrativos y errores en donde se citan personajes que aparecen en el libro. Citan en el apartado de cuando iban a instalar la primera planta eléctrica. Lee: “Cuando fue instalado el alumbrado en el pueblo, habían unas pocas calles y casas, alumbraba mas una colilla de cigarrillo, era la expresión cotidiana. Mas tarde hubo un intento fallido por montar una planta hidroeléctrica construyendo una presa en el cause del río grande por parte de Isaac Mayor. Saben quien era Isaac Mayor? - Nos pregunta - Por parte de esta viejita, - dirigiéndose a su esposa- el padrino de ella y el padrino mio, no lo voy a conocer! Él mismo se hacia sus zapatos, se moría una vaca y con el cuero le hacia rotos y se hacia unas alpargatas y esos eran los zapatos de él! Con los calzoncitos amarrados hasta aquí -señalándose la cintura, y dirigiéndose a su esposa le corrobora- si o no? -Continúa- Me parece estarlo viendo, me regaló un caballito que le mocharon la cola para que no lo embarrara a uno en época de invierno. Meneaba la cola para espantar las moscas y le barnizaban a uno el pantalón de barro cuando uno iba a la escuela. Él era el dueño de la hacienda de Potrerillos aquí, no sabía firmar, totalmente analfasbetia (analfabeta), para ir a montar una hidroeléctrica!” Todos los presentes sueltan la risa a carcajadas, su esposa agrega: “Él solo sabía ordeñar vacas”.
Mire más pa'delante, todo esto que tengo así subrayado yo lo leo y me muero de la risa de todos estos errores que hay en el libro”, continua Navarrete. “Después trajeron unas plantas eléctricas, esto es cierto, pero no coinciden las fechas para nada.” En conclusión, reflexionamos que los que elaboraron el libro no investigaron a fondo, no contrarrestaron diversas versiones dadas por los vecinos del pueblo o de los mayores que ya han fallecido. Agrega que en la documentación del archivo de alcaldía de Restrepo se leen muchos errores de índole administrativo de época, como es el caso del documento en el que nombran a los primeros cinco concejales pero el que firma no esta entre los cinco, y es quien debería ser el presidente del consejo, osea cuatro y con él cinco. Comenta: “Cuando yo fui alcalde 1982, observé unos cartones en el patio de la Alcaldía, la mayoría estaban a la intemperie. Pregunté que había en los cajas de cartón y la respuesta fue: documentos antiguos de Restrepo. Resulta que como habían trasladado la Alcaldía a la nueva sede, ya que la antigua estuvo en lo que hoy es el Hotel Calima, por finales de los 60 y comienzos de los 70, los habían dejado ahí y nadie se percató por guardarlos en un sitio seguro. Aquí muy pocos alcaldes se preocuparon por conservar y archivar estos antiguos documentos. Muchos se estropearon y los tiraron! Ahora vienen y se inventan la historia de Restrepo. No quiero leer más este libro!- termina diciendo- pero me da rabia que la gente que lo lea crea que todo fue como esta en el libro. Yo le argumento, para el que no conoce los personajes del pueblo de aquellas épocas, pues se lo cree.” Para finalizar, le pregunto que harán para el centenario de Restrepo (1013 – 2013). Responde: “Para decirte la verdad, creo que sabes más tu que yo.”
Bueno, yo pienso publicar una monografía de Ricardo Ossa Montoya, osea “Mono que significa uno y grafía descripción”, me limitaré a narrar cuando llegaron los Ossa a Restrepo, sus vivencias y luchas. Pero eso si, corroboraré bien los datos y documentos y lo publicaremos en el blog como nuestro homenaje a los colonos Ossa Ossa, ancestros paisas. Como decía Oswaldo Ossa Ossa, oriundo de Restrepo, a sus 94 años de edad: “Fuimos familia de bien y de progreso.” 

Fiesta de la virgen del Carmen en Restrepo
Si, la patrona del pueblo y esa noche nos tocó la procesión del gremio de los transportistas, ya que la virgen del Carmen es también su patrona. Lo que no nos alertó el primo Carlos Eduardo fue traernos unos tapones para los oídos. Es la procesión mas ruidosa a la que yo haya asistido, y eso que he estado en muchas fiestas en el mediterráneo que acostumbran fuegos pirotécnicos o en la fallas de Valencia con pólvora y muchos petardos, pero aquí en Restrepo es la locura del ruido. A estas alturas la Virgen del Carmen debe estar sorda! Los transportistas hacen sonar sus pitos a la vez durante la procesión produciendo un efecto retumbante. Aquí se produce un milagro público, realmente es un MILAGRO no salir sordo de esta fiesta!
Entre los humos con mas de 40 sustancias calificadas de contaminantes del aire, el ruido ensordecedor de sus motores, acompañado de los pitos de las motos y carros en el desfile, aparece un trasporte tradicional Antioqueño: un Jeep Willys, pero sin aroma a café. Como colonizadores de mundo una, alegoría a la forma mas humana de los colonos antioqueños con su carácter evocador de siempre, emigrar a nuevas tierras llevando con sigo todo sus trastos “corotos”, y como vivimos en el país del sagrado corazón de Jesús, un gran cuadro del patrón de todos los colombianos, su bandera y su carriel paisa.
Durante el festejo nos acompañaron Omar Leyes, “el negro”, y el “secretario chiquito”, Germán Realpe. Esa noche nos hospedados en el Hotel Calima. El primo Carlos Eduardo Ossa Lenis se encargó de su restauración convirtiendo esta antigua casa que fue la antigua Alcaldía y cárcel en un agradable hotel con amplios corredores, al más clásico estilo colonial de la región, agregándole balcones para lograr en la arquitectura de su fachada como una casona señorial española. Es un lugar digno de visitar en Restrepo, en su patio interior le fue montada una clásica fuente de pierda traída de Popayan, una copia bien trabajada. Da la sensación de estar en una casa colonial de la Candelaria de Bogotá.
Embalse Calima El Arriero Paisa y La Golosa.
Terminada la visita salimos vía el embalse Calima llamado “lago calima”, paramos a comer en un agradable restaurante, El Arriero Paisa (entrada quinta al embalse), construido todo con guadua. La guadua es un material natural de las regiones de temperatura cálidas que permite la construcción de cabañas y puentes. El interior del restaurante es decorado típico antioqueño y está a la orilla del embalse Calima. De entrada tostadas plátano verde con salsa hogao y la tradicional bandeja paisa . Para la hora del postre recomendamos desplazarse unos kilómetros hasta llegar a la Golosa, en Calima. Recomendamos saborear las tortas, postres y dulces, todo es exquisito y gran variedad de repostería con sabor casero, como cocinaban nuestras abuelas, hecho en la finca aledaña. “La Golosa” y queda a pie de la carretera en la vía a Buenaventura, sobre la calzada de dirección a Cali, fácil aseso, además tiene una esplendida vista sobre el embalse Calima.
 
Los acompañantes a la excursión al cementerio de Restrepo.
Subiendo la cuesta que pasa por el cementerio se llega a una altura de donde se puede apreciar todo Restrepo y con binóculos hasta el pueblo del Darién, es toda una vista esplendida. 

Gracias Primo Carlos Eduardo Ossa Lenis, Genealogía Familiar. "Que estas bellas tierra y sus paisajes que vieron nuestros ancestros quieran salvarnos del olvido. Esta investigación realizada como homenaje por las décadas que vivieron luchando por un mejor mañana”. Jairo Narváez Soto y María Elisa Guerrero Collazos
  barcelona@jaironarvaez.com